La Federación Bioquímica cursó a fines de diciembre una nota a las nuevas autoridades del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados, encabezadas ahora por el Dr. Esteban Leguizamo, pidiendo con carácter de urgencia la realización de una reunión durante la cual, como punto principal, aunque no único, se reclamará una urgente recomposición arancelaria en virtud de la nueva y fortísima disparada de los insumos de laboratorio.

Se espera que la respuesta a esa solicitud se brinde cuanto antes en función de la creciente gravedad de la ya de por sí acuciante situación por la que venimos atravesando los bioquímicos, la que volvió a complicarse, y sobremanera, tras la nueva y drástica devaluación de la moneda argentina dispuesta por el presidente Milei tras su asunción de la Primera Magistratura del país.

Debemos recordar que con el PAMI se había cerrado para 2023 una pauta arancelaria del 162% más un 24% de “extra cápita” al superarse la tasa de uso pactada contractualmente, algo que viene sucediendo todos los meses.

También FABA logró que el Instituto modificara la forma de abonar la cápita pasándose de dos pagos del 50% cada uno, a uno del 75% correspondiente al mes previo y el segundo del 25% a 60 días.

A la flamante conducción del PAMI, las autoridades de la Federación Bioquímica plantearán las pésimas condiciones actuales de trabajo a las que nos vemos sometidos los bioquímicos, debiendo hacer frente a una paritaria de los empleados de Sanidad que es, como se sabe, del 137% anual; y más que nada a la tremenda escalada de los costos de insumos del laboratorio, además de una suba de los servicios de luz, gas e internet que se viene en forma inminente.

Para ello, llevaremos planillas de costos de cada uno de esos gastos de funcionamiento de nuestros laboratorios, para demostrar que hay varias determinaciones que son poco menos que deficitarias.

Esos números tienen la claridad y el contraste suficientes para respaldar con creces el pedido de obtener una urgente recomposición arancelaria que formulará la Federación Bioquímica, en la inteligencia de que el Dr. Leguizamo, un médico de dilatada trayectoria y amplia experiencia en el PAMI ya que venía desempeñándose al frente de la Unidad de Gestión Local (UGL) de la ciudad de Buenos Aires, comprenderá la gravedad de la situación existente.

El cuadro que enmarca la realidad de nuestro quehacer profesional requiere de soluciones urgentes y de peso, ya que, de lo contrario, no se puede garantizar una atención como la que se viene brindando hasta el momento, debido a que los bioquímicos ya no tenemos margen para más esfuerzos, al tiempo que muchos laboratorios de la provincia de Buenos Aires se encuentran en una situación francamente comprometida.

Tal como se anticipara en la última entrega de FABA Informa, se requerirá a las nuevas autoridades del Instituto otros puntos por los que venimos bregando sin éxito desde hace un tiempo. Entre esos aspectos, uno de los que más nos interesa es el cambio de la modalidad contractual para pasar del sistema de cápita a un convenio de pago por prestación, tal como ha ocurrido con la mayor parte de los prestadores de salud de la obra social.

Otro tema sobre el cual haremos hincapié es el de la aplicación de lo dispuesto por las guías clínicas de las distintas patologías a la hora de prescribir prácticas bioquímicas, lo que, entre otras cosas, redundará en la agilización de las auditorías.