Institucional

Revista 629

Siguen las negociaciones de FABA con IOMA y PAMI

Con la mutual estatal bonaerense se discute una actualización arancelaria de urgente aplicación, mientras que con la obra social de la tercera edad se analiza, además de una suba de las remuneraciones profesionales, una mejora del modelo contractual

Durante febrero prosiguieron activamente las tratativas que la Federación Bioquímica viene llevando a cabo con las autoridades del Instituto de Obra Médico Asistencial y con las de la obra social de jubilados y pensionados nacionales, con el objetivo de lograr por distintas vías un incremento arancelario que comporte en los hechos un justo reconocimiento de la labor que desde hace décadas vienen cumpliendo los profesionales del laboratorio de la provincia de Buenos Aires, y que, últimamente han visto no sólo mermar sus ingresos, sino que demás, están sufriendo dificultades crecientes para sostener el normal funcionamiento de sus respectivos establecimientos de análisis clínicos.

En ese sentido, una vez más debemos señalar que nuestra actividad ha sufrido cambios en el aprovisionamiento de insumos, fundamentalmente de los reactivos, en el sentido de que se deben ir reponiendo con una periodicidad cada vez más breve que no tiene equivalencia con las actualizaciones arancelarias de ambas obras sociales estatales tanto en el tiempo como en la proporcionalidad dineraria del caso, porque hay productos indispensables para el laboratorio cuyos valores trepan más que las remuneraciones profesionales que percibimos.

Este descalce de nuestros ingresos hace entonces que los reclamos y propuestas que viene realizando FABA en materia arancelaria y contractual debieran tener respuestas más agiles y que eviten cualquier posible deterioro que pueda producirse en la habitual alta calidad en la atención de sus afiliados, algo que nadie desea desde luego.

Con respecto al IOMA hay que decir que luego de lograr a fines del año pasado, después de una larga insistencia de la Federación Bioquímica, que el Instituto reconociera la revalorización de más de 80 prácticas, a principios de enero último comenzamos a reclamar una actualización arancelaria que esperamos obtener a la brevedad.

Esa revalorización se dio para un gran número de determinaciones que venían resultando ostensiblemente deficitarias y representó un aumento en nuestros ingresos pero que sirvieron precisamente, para poner fin al déficit que esas prácticas nos representaban.

Por eso hay que poner en claro que las negociaciones de las autoridades de la Federación Bioquímica con la conducción del Instituto se centran ahora, como se dijo, en una actualización arancelaria del valor de la cápita y de aquellas prácticas comprendidas en los pagos por prestación.

Es de esperar que las tratativas con el IOMA lleguen a buen puerto en marzo.

En tanto con el PAMI, proseguimos reclamando que se disponga una mejora del modelo contractual entre los bioquímicos de nuestra provincia y ese Instituto, además de insistir en una actualización arancelaria para los primeros meses del año.

Demás está decir que a lo que aspiramos y pedimos, es que esa mejora en las condiciones contractuales se traduzca en importante reconocimiento en el valor de nuestras remuneraciones profesionales.

Pero el reclamo en las condiciones contractuales se completa con las tratativas, por cuerda separada, de un incremento de los valores capitarios, luego de que el Instituto diera curso a un pedido de la Federación Bioquímica y reconociera a fines de 2024 la aplicación del sistema de tasa de incentivos de siete prácticas de alta demanda y que superan la tasa de uso acordada en el convenio prestacional, tal como lo hiciera unos meses antes con otras trece determinaciones.