Institucional

Revista 624

Voluntad política para un cambio tan necesario

Por Dr. Fabio Sayavedra, secretario de FABA

El congreso de Acami fue un encuentro más que interesante debido a que en él estuvieron representadas la mayoría de las partes que componen el conjunto del sector sanitario argentino. Si bien cada uno de los expositores le dio un marco de excelencia, profesionalismo y objetividad, la relevancia del Congreso estuvo dada por la presencia de los titulares de las carteras de Salud de CABA, el Dr. Fernán Quirós; provincia de Buenos Aires, Dr. Nicolás Kreplak , quienes participaron de la mesa de apertura, y luego de 12 hs de Congreso, el cierre estuvo a cargo del Ministro de Salud de la Nación Dr. Mario Russo*.

La presencia de Héctor Daer, Secretario general de la CGT y representante de FATSA (Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina), aportó su mirada desde perfil sindical con un moderado discurso pero sin abandonar su estilo, no pudo evitar caer en el obvio concepto de que el sector sanitario necesita el aporte de recursos necesarios para un debido financiamiento.

El Dr. Gabriel Oriolo, Superintendente de Servicio de Salud, describió la centralidad de la gestión actual que dirige en la SSS, detallando haber recibido una institución caótica, superpoblada de empleados, donde la falta de control en la asignación de recursos la tornan ineficiente y deficitaria, por citar un ejemplo de las incongruencias existentes, resulta muy difícil de comprender que, el grueso de los recursos que otorga el Fondo Solidario de Redistribución sea absorbido para dar servicios de transporte y educación a personas con discapacidad, recursos que claramente deberían ser aportados por otros ministerios.

El Sector privado del sector sanitario estuvo representado por las exposiciones de los directores de Sancor Salud, Omint, Sanatorio Mater Dei y por el Lic. Jorge Cherro, Presidente de ADECRA, la cámara que representa a clínicas, sanatorios, hospitales y centros ambulatorios de salud privados en Argentina. Cherro aportó objetivamente y con datos duros, el alarmante nivel de desfinanciamiento que sufre en la actualidad el sector prestador en Argentina.

El Lic. Hugo Magonza, presidente de la UAS, remarcó la relevancia que tiene el sector privado, que brinda atención al 70% de la población de nuestro país y que brinda trabajo registrado a casi 1.500.000 trabajadores, dato que convierte al sector, en uno de los más importantes en su capacidad de generar fuentes de trabajo registrado, información también aportada por el titular de ADECRA.

Completaron las exposiciones del sector privado, directivos de los Hospitales de las colectividades (Italiano, Alemán, Británico y Sirio Libanés).

El encuentro tuvo una mesa internacional nutrida por representantes sanitaristas latinoamericanos, de Paraguay, Uruguay y Ecuador, aportando datos dignos de contraste con el sistema sanitario argentino.

Mesa judicial

Haber incorporado una "Mesa Judicial" fue un acierto de los organizadores de este congreso, la misma estuvo conformada por dos Dres. en Derecho y enriquecida con la presencia de un Juez a cargo de un juzgado de la localidad de San Martín, provincia de Bs.As. Es tal el impacto que produce la judicialización de la medicina en Argentina, que los financiadores en la actualidad deben reservar un 7% de su presupuesto para afrontar los gastos que estas demandas judiciales exigen; es frustrante dar con ese dato que supera el porcentaje que los financiadores destinan a la demanda de análisis clínicos en el presupuesto total de un financiador.

La conferencia titulada: “El impacto de la Inteligencia Artificial en la Salud ¿Hacia dónde vamos?” brindada por los Dres. E. Díaz Canton y G. S. Landman, fue una de las exposiciones más esperadas debido a la relevancia, que por estos días genera gran expectativa, no solo porque aportará mayor velocidad, eficiencia y objetividad en la aplicación de diagnósticos y tratamientos, sino que será una herramienta de gestión indispensable en un corto y mediano plazo, para instituciones como Faba; así lo entendemos quienes tenemos la responsabilidad de promover actualizaciones tecnológicas a los fines de optimizar recursos mejorando la gestión interna, apuntando a mejorar la eficiencia y calidad de los servicios que brindamos. Para ello, la capacitación del recurso humano disponible resulta vital a los fines de incorporar las nuevas tecnologías como herramientas de gestión.

La participación de la prensa

Presenciamos también una Mesa integrada por reconocidos periodistas de Telefé, La Nación y Clarín quienes aportaron la mirada de los medios integrando periodismo, economía, política y salud, un interesante aporte de cómo los medios reflejan hacia la población y como la población les devuelve la calidad que perciben cuando demandan servicios de salud en el sector público y privado. Tienen muy en claro los problemas por los cuales atraviesa el sector, sin ignorar que en las encuestas de orden de prioridades en la población, la salud dista mucho de ocupar los lugares de principal importancia.

El cambio estructural del sistema de salud argentino

El cambio estructural del sistema de salud argentino es posible, nuestro país dispone del recurso humano altamente capacitado para realizarlo, excelentes sanitaristas, especialistas en economía de la salud y especialistas en gestión de salud.

Pero para que esta reestructuración del sistema sea realidad, se necesita el compromiso de las autoridades nacionales y la voluntad política que otorgue el espacio adecuado, en los ámbitos apropiados para un debate que concluya en el logro de los consensos que tan importante y necesario cambio requiere, en reglamentaciones, normativas, incumbencias, y regulaciones.

Esta necesidad imperiosa de cambio choca de manera frontal con el escaso nivel de interés público que la sociedad expone en cada encuesta de orden de prioridades, donde la salud aparece muy por detrás de economía, el trabajo, la seguridad, la corrupción y otros. Así, las autoridades políticas, atentas siempre al tono de los resultados de las encuestas, no colocan a la situación sanitaria como prioritaria y esencial, como si no lo fuera. Consecuencia de ello, el ítem sanitario no ocupa el rol que debiera en la agenda política al ritmo del nivel de preocupación poblacional, y así por décadas enteras, tristemente, la salud se convierte en un bien preciado solo cuando deja de ser óptima y demanda sus servicios de atención.

Emergencia sanitaria

La situación de emergencia sanitaria promulgada en 2002, es otra muestra del escaso nivel de atención que recibe el sector de la salud en Argentina; 22 años sin modificaciones al respecto, y la propuesta de salida que el Estado plantea no resulta viable, en función del estado financiero de los prestadores.

La articulación de las acciones sanitarias públicas y privadas necesita de un marco de integración adecuado en la búsqueda de un sistema sanitario, eficaz, eficiente, solidario y equitativo, que asegure a cada individuo la accesibilidad adecuada en cada caso de necesidad en la demanda de atención. Que destierre las tan arraigadas desviaciones de segmentación y fragmentación que lo tornan en sentido contrario al deseado.

Es necesario un sinceramiento definitivo, que tenga como punto de partida el análisis de los datos objetivos disponibles. Resulta imposible continuar negando la irrefutable afirmación: la demanda sin la disponibilidad de los recursos necesarios para ser satisfecha, en calidad y en cantidad, es inviable. El acceso a los avances tecnológicos en diagnóstico y tratamientos es imposible sin el debido financiamiento.

Revisión del PMO

Las leyes que amplían derechos y otorgan mayor accesibilidad constituyen un claro ejemplo de la falta de objetividad con que son reglamentadas, porque omiten el punto crucial de la fuente de financiamiento necesaria para su cumplimiento. Los fallos judiciales que sientan jurisprudencia en materia de salud y otorgan accesibilidad ilimitada a costosos tratamientos, incurren en el mismo error, con el agravante que en ocasiones pueden incluso desoír las recomendaciones de los expertos integrantes de la oficina de evaluación de nuevas tecnologías de la Superintendencia de Servicios de Salud. No se puede brindar el acceso a servicios ilimitados con recursos limitados.

En virtud de ello, el PMO (Programa Médico obligatorio) también necesita una revisión integral, lógica frase que escuchamos varias veces a lo largo de las distintas exposiciones en el Congreso de ACAMI.

Los conceptos vertidos en todo el Congreso, una vez más, nos resultan básicos y sencillos de entender, las crónicas dolencias del sistema sanitario argentino se encuentran debidamente diagnosticadas, para establecer el tratamiento objetivo que las revierta, sobra recurso humano capacitado. Sin embargo, continúa sin aparecer la tan esperada voluntad política convocante para que el cambio sea realidad.

La presencia y los discursos de los tres ministros presentes en el evento, dan cuenta de cierta voluntad de escucha y diálogo constructivo, pero está claro, que si la voluntad expresada no se convierte en acción directa y concreta, que abandone el voluntarismo, el prestigioso Congreso de ACAMI, habrá resultado, una vez más, la gran catarsis del sector sanitario argentino.

El sector prestador bioquímico

Inmerso en tal estado de situación, el sector prestador bioquímico no se encuentra aislado de sufrir las consecuencias que la realidad impone. Los directivos de FABA estamos al tanto de esta acuciante realidad, razón por la cual la gestión en la obtención de los recursos que aseguren seguir brindando un servicio de calidad y debidamente financiado es de notoria centralidad en nuestro accionar diario, teniendo como prioridad la continuidad y permanencia de las fuentes de trabajo que el sector genera. Desafiando constantemente la postura de los financiadores estatales, sindicales y privados, quienes pretenden un servicio de calidad que adquiere insumos, reactivos, equipamiento, salarios, servicios y demás ítems, a valor de mercado y obtiene financiamiento regulado, al igual que todo el sector prestador del sistema sanitario.

Es la envidia de todos los prestadores, el trato diferencial que recibe la industria farmacéutica, que obtiene el mayor porcentaje de los recursos que cada financiador dispone para afrontar servicios de salud.

El fuerte impacto económico financiero impuesto a fines de 2023 y principios de 2024 vulneró las capacidades económico - financieras de todo el sector prestador en general y de sectores insumo- dependientes como el nuestro, en particular.

Reafirmamos una vez más nuestro compromiso de inclinar la balanza hacia el lado del debido financiamiento para nuestra actividad, para asegurar así, los destinos de la Red de laboratorios que componen FABA en todo el ámbito provincial.

* Al cierre de esta edición, una muestra más de la fragilidad que muestra nuestro sistema sanitario, quien diera el cierre del Congreso, el Dr. Mario Russo dejaba de ser ministro de Salud de Salud de la Nación, para ser reemplazado por el Dr. Mario Lugones.