Institucional

Revista 614

A la espera de que IOMA defina una suba arancelaria

Comenzó en noviembre la actualización progresiva de los bonos de los coseguros a partir de la aplicación de un porcentaje extra de la cápita.

El Instituto de Obra Médico Asistencial no ha definido todavía la prometida mejora arancelaria para la última parte del año en curso para todos sus prestadores, y al cierre de la presente edición de FABA Informa, se aguardaba que se pusiera fecha para convocar a las autoridades de la Federación Bioquímica para la toma de decisiones en la materia.

Como se sabe, la conducción del IOMA había señalado en octubre que debía esperarse la definición de las negociaciones salariales en el marco de un nuevo llamado a paritarias con los distintos sindicatos que representan a los diversos sectores de la administración pública provincial, docentes, judiciales y profesionales de la salud, entre otros.

De las subas salariales a acordarse saldrán los fondos que por ley deben girarse al IOMA, cuyas autoridades recién en ese momento sabrán con qué cantidad de fondos contarán para mejorar las retribuciones profesionales de sus efectores.

Las paritarias se fueron demorando por falta de acuerdos iniciales y si bien han existido acercamientos en las negociaciones salariales entre el gobierno y los gremios, según se explicó desde el Instituto, faltan algunas definiciones finales para trazar un promedio, ya que los porcentajes de incrementos de sueldos no son homogéneos entre los trabajadores de los diversos sectores del Estado bonaerense.

Así las cosas, la totalidad de los prestadores del Instituto, incluidos los bioquímicos desde luego, aguardamos que esas definiciones se produzcan con urgencia, porque seguimos trabajado con aranceles que al mes de octubre se ubican con una mejora de sólo el 85% con respecto a los valores de diciembre 2022.

El caso de los profesionales del laboratorio es mucho más complicado porque sabemos y sufrimos en carne propia cómo se han disparado los gastos de funcionamiento de nuestros establecimientos, especialmente en lo que tiene que ver con los costos de los reactivos y otros insumos importados.

Se debe tener en cuenta que el compromiso formal asumido por la conducción del IOMA ha sido el de trasladar a los honorarios de sus prestadores exactamente el mismo porcentaje de incremento salarial que surja de las negociaciones paritarias con los trabajadores estatales, pero desde la Federación Bioquímica ya hemos anticipado a las autoridades de la obra social que nosotros aspiramos a que la mejora arancelaria para la última parte del año para nosotros sea sustancialmente superior al guarismo salarial cuya definición se aguarda.

Y sobre este punto, no se puede evitar efectuar una comparación con la nueva suba arancelaria dispuesta por el PAMI (ver página 3), la que con dos escalas en noviembre y diciembre llevó la pauta anual al 162%. Históricamente, la obra social de los jubilados nacionales y el IOMA han mantenido escalas porcentuales similares en las remuneraciones a sus respectivos prestadores.

Además, hay que recordar que los sueldos de los empleados de laboratorio, a través de la paritaria con el gremio de Sanidad, se han incrementado en un 137% en distintas etapas, de modo que sólo para igualar ese valor, el IOMA debe disponer una suba arancelaria acorde.

Bonos de coseguros

Por otra parte, hay que señalar que el Directorio del Instituto rubricó el acuerdo al que la Presidencia del IOMA había arribado con la Federación Bioquímica con el objeto de comenzar a actualizar progresivamente desde noviembre, el valor de los bonos de los coseguros gremiales, tal como lo habíamos anticipado en la última entrega de este medio de comunicación institucional.

La actualización de los coseguros, como ya se indicara, se irá haciendo efectiva con porcentajes extras de la cápita, sin que ese guarismo sea computado dentro de la pauta arancelaria que se negocie.

Con la firma de los integrantes del Directorio entonces, se inició el camino que llevará a una paulatina actualización de los coseguros de IOMA, “freezados” desde hace más de tres años en 200 pesos.

En esta primera etapa, que comenzó a tener vigencia en noviembre, el porcentaje extra de la cápita es del 8%, esperándose que progresivamente se alcance el valor real de los coseguros cuanto antes.